Pasame el bronceador...

Les conté en una entrada anterior sobre los efectos nocivos del sol sobre mi espalda?
Bien, es bueno ver como van cicatrizando las heridas de a poco, y ni hablar lo divertido que es pasar el tiempo despellejándose, lástima que en la espalda, ente ambos homóplatos, es una zona casi inaccesible para los que no tenemos flexibilidad, y la picazón insoportable, ni les cuento, andar frotándose la espalda con los marcos de las puertas, los postes de luz y las paradas de colectivo me trájo muchos problemas con la gente del neuropsiquiátrico...
En fin, ya que estamos, no viene mal recordarles que la exposición prolongada del sol sobre la piel, más en los horarios de 13:00 a 16:00 hs, puede provocar serias lesiones a nivel dérmico, lesiones precancerígenas, manchas y muchos otros problemas.